Reseña: Peligro en la Intimidad es una película extraña, que mezcla diversos géneros (terror, thriller, drama y hasta ciertos atisbos de comedia negra) para terminar formando una experiencia anómala e impredecible, que logra capturar al espectador justamente por desviarse por completo de terrenos fáciles o predecibles. Si bien la cinta está basada en una obra de teatro, el legendario director William Friedkin encontró la manera de plasmar la historia de una forma visualmente interesante, jamás tornándose estática ni monótona. Las actuaciones de Ashley Judd y el gran Michael Shannon son excelentes, navegando sin dificultad y con absoluta crediblidad por la amplia gama de emociones que sus personajes atraviesan. El resto del elenco también hace un trabajo eficiente (por cierto, ¿me parece a mí o Lynn Collins realmente se parece a Haley Bennett?), pero indudablemente Judd y Shannon son quienes cargan con toda la cinta sobre sus hombros, lo cual logran con mucho éxito. Quizás no sea una cinta para todos los gustos, pero personalmente me gustó Peligro en la Intimidad, principalmente porque siempre aprecio las películas que rompen moldes y salen del común, evitando así todo tipo de encasillamiento en un género determinado.
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