Reseña: Detour está lejos de ser una gran película. Sin embargo, logra entretener a base de un guión ingenioso y un trío de actores jóvenes y talentosos en los personajes principales (Tye Sheridan, Bel Powley y Emory Cohen). Me pareció interesante la manera en la cual el guión juega con las expectativas de la audiencia, haciéndonos creer que estamos viendo una cosa, para luego hacernos dar cuenta que en realidad estábamos viendo otra. Quizás no esté siendo muy claro al decir eso, pero cuando vean la cinta, entenderán la hábil manera en la cual el guión está planeado, así como su eficiente ejecución. Entonces, no estamos ante una cinta excepcional ni mucho menos. Sin embargo, eso no me impide recomendar Detour como una experiencia dinámica y entretenida que logra contar una buena historia de manera interesante. Y aunque la cinta no tenga mayores ambiciones ni pretensiones, eso bastó para dejarme satisfecho. En pocas palabras, una experiencia compacta y eficaz.
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