Reseña: Graduación es una película "de guión", y no lo digo en un buen sentido. Es una cinta donde todo está demasiado "escrito" y subrayado, y es muy fácil notar la manipulación y los artificios detrás del guión (hay demasiadas cosas que hacen ruido y no logra integrarse al relato de manera fluida), mientras se descuida el aspecto visual. En otras palabras, la experiencia se termina tornando monótona, ya que la película narra mucho y muestra poco, por lo que la historia tranquilamente podría ser "escuchada" tornando la necesidad de las imágenes casi innecesaria. De todas formas, las actuaciones son innegablemente perfectas; en ningún momento parece que estamos viendo actores, sino personas reales. De todas maneras, Graduación no me dejó muy satisfecho, y definitivamente es una película menor cuando la comparamos con otras cintas rumanas de los últimos 10 años, tales como Aquel Martes Después de Navidad (Marti, dupã Crãciun -2010-) o Toata Lumea din Familia Noastra (2012), las cuales contaron con guiones mucho más interesantes y provocativos, además de contar con excelentes puestas en escena. Entonces, creo que esas dos películas son alternativas mucho mejores para quienes tengan ganas de visitar el cine rumano.
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