Reseña: Por lo menos, tengo que decir esto: no creo que, en lo que resta del año, vea una película más extraña e inusual que Colosal. Sin embargo, eso no significa que sea del todo satisfactoria. La cinta cuenta con muchas ideas muy interesantes, pero, por alguna razón, nunca terminan de materializarse, por lo que no dejan de ser conceptos cuyo potencial no logra ser completamente explotado. Además, no tragué mucho a Anne Hathaway en el personaje principal; por el otro lado, Jason Sudeikis me sorprendió con una actuación sorpresivamente seria, en la cual demuestra una faceta oscura que nunca antes había dejado al descubierto en sus roles cómicos. Entonces, Colosal es una película que contaba con un gran potencial, pero se terminó quedando corta de lo que podría haber sido. Aún así, el director y guionista Nacho Vigalondo merece respeto por haberse arriesgado con un proyecto tan ambicioso, original y diferente, por lo que, incluso si la película no logró un éxito artístico total, merece el apoyo de todos aquellos espectadores que busquen experiencias que rompen el molde, y nos llevan por caminos que se desvían de lo usual y predecible.
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