Reseña: The Girl Next Door (no confundirla con la homónima comedia juvenil del 2004) es "porno tortura" pura y auténtica: una película sobre una joven que es salvajemente torturada sin un sustento narrativo. Es cierto que un par de momentos cumplen con su objetivo de incomodar, pero eso no es tanto un mérito del director Gregory M. Wilson, sino de que el guión incluye cosas realmente extremas. Por lo demás, las actuaciones me parecieron bastante malas, mientras que la dirección de Wilson se siente demasiado plana, carente del más mínimo estilo visual y hasta ocasionalmente amateur. Hace aproximadamente un mes, cuando vi Horas de Terror (Funny Games, 1997), no quedé muy satisfecho con ella porque la crueldad por sí sola no me resulta particularmente interesante; hacen falta una sólida narrativa y personajes interesantes. Con The Girl Next Door, sentí exactamente lo mismo, con la diferencia de que, por lo menos, Horas de Terror contaba con dirección mucho más pulida y refinada, así como también actores enormemente superiores. En resumen, The Girl Next Door es una hueca e insustancial muestra de sadismo que no logra satisfacer en el nivel narrativo ni en el emocional.
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