domingo, 15 de abril de 2018
La Chica del Puente (La Fille sur le Pont, 1999)
Reseña: Como ya mencioné en otras ocasiones, hay muchas películas que me dan la impresión de haber sido originalmente concebidas como cortometrajes, que luego son forzadamente estiradas para alcanzar la duración de un largo. La Chica del Puente es una de esas cintas, y me quedé pensando que podría haber sido tranquilamente un cortometraje simpático; pero, en su estado, termina cansando después de un rato y sintiéndose demasiado larga... incluso con una duración que apenas alcanza los noventa minutos.
La premisa central de la película (un artista de medio pelo salva a una chica del suicidio, y empieza a montar espectáculos con ella, al mismo tiempo que la mala suerte de ambos empieza a irse) tiene una cierta gracia, pero se agota a los veinte minutos. Después de un rato, La Chica del Puente termina dando vueltas constantemente sobre lo mismo, sin un gran progreso narrativo ni emocional.
Sin embargo, hay algunos elementos positivos en La Chica del Puente. La cinematografía en blanco y negro es visualmente atractiva, y contribuye a teñir las imágenes de una cierta atmósfera. Por su parte, las actuaciones de Daniel Auteuil y Vanessa Paradis en los roles protagónicos son excelentes, llenas de expresividad y matices. Finalmente, el director Patrice Leconte brinda personalidad a su trabajo, aunque no se ve totalmente respaldado por el guión con el que tuvo que trabajar.
A pesar de sus virtudes, me cuesta expresar particular entusiasmo hacia La Chica del Puente. Como dije previamente, es una cinta a la cual el formato de largometraje le queda demasiado grande, lo cual es una pena, ya que tanto los actores como el director merecían mejor material para complementar su talento. Por eso, el sabor que termina quedando es el de una película fallida y poco satisfactoria.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario