viernes, 30 de noviembre de 2018
Bedevilled (Kim Bok-nam Salinsageonui Jeonmal, 2010)
Reseña: Bedevilled es una de esas películas sobre las cuales conviene no saber absolutamente nada antes de verlas. Esta es una cinta impredecible, en la cual todo se va "cocinando" de manera gradual y pausada durante la primera mitad, para luego explotar con toda la furia durante la segunda. El resultado final es una experiencia que no necesariamente se "disfruta", ya que es cruel y triste, pero que definitivamente logra despertar un abundante número de emociones en el espectador e involucrarlo de manera visceral e intensa.
Los aspectos técnicos de Bedevilled me parecieron excelentes. La cinematografía retrata la isla en donde transcurre la mayor parte de la película con imponente belleza, lo cual funciona como un apropiado contraste de toda la angustia y el sufrimiento que se retrata en la pantalla. La dirección de Jang Cheol-soo es firme y segura, sabiendo construir la primera mitad con un tono deliberado para luego adquirir un ritmo implacable que no deja respiro con su catártica violencia. Finalmente, las actuaciones son muy buenas, destacando la de Seo Yeong-hie, quien enfrentó un rol difícil con absoluta convicción.
El guion está bastante bien construido, presentándonos algunas cosas al principio que parecen no tener relevancia, pero que luego la adquieren al final de la película, logrando que la experiencia completa cierre un círculo y demostrando que nada fue librado al azar. Adicionalmente, me pareció muy loable que el guion encontrara una vuelta inusual a una fórmula que se ha aplicado infinidad de veces en el cine (no mencionaré cuál para no revelar más de la cuenta).
En conclusión, Bedevilled me pareció una película muy interesante, que cumple con su cometido de hacer sufrir al espectador en más de una ocasión, aunque también le brinda refrescantes momentos de catarsis, hasta culminar en un final que dista mucho de ser feliz, pero que indudablemente logra satisfacer. En pocas palabras, otra muestra de la habilidad del cine coreano para tomar fórmulas populares de Hollywood y darles un giro fresco y novedoso.
The Green Butchers (De Grønne Slagtere, 2003)
Reseña: Las películas del director Anders Thomas Jensen son bizarras comedias negras con un inusual balance entre humor y crueldad. Es un estilo difícil de describir, pero no es infalible. Personalmente, creo que ha funcionado bien en Flickering Lights (Blinkende Lygter, 2000) y Adam's Apples (Adams Æbler, 2005), pero no ha dado resultados satisfactorios en Men & Chicken (Mænd og Høns, 2015) ni en The Green Butchers, la cinta en la cual se enfocará este escrito.
A grandes rasgos, la trama de The Green Butchers se enfoca en dos carniceros que tienen gran éxito con su nuevo comercio, aunque los clientes no saben que la carne vendida pertenece a seres humanos. Es una idea interesante con abundante potencial de humor negro, pero la película entera gira en torno a ese mismo chiste, sin una progresión narrativa ni emocional. Por su parte, cuando pretende añadir otros componentes a la trama, terminan siendo divagaciones que no conducen a ningún lado y terminan aburriendo un poco.
En cuanto al elenco, Mads Mikkelsen es uno de mis actores favoritos, pero lo sentí desperdiciado en esta película, ya que el guion no desarrolla adecuadamente a su personaje, y su principal rasgo distintivo termina siendo la rídicula peluca que usa. Lo mismo podría decirse de Nikolaj Lie Kaas en el rol co-protagónico (exceptuando el asunto de la peluca), mientras que los intérpretes secundarios no tienen material suficientemente sustancioso como para que sus personajes terminen dejando una particular impresión.
En fin, cuando las películas de Jensen fallan, al menos lo hacen intentando algo diferente y poco convencional, lo cual siempre es loable aunque el resultado final no logre satisfacer. De todas maneras, no puedo darle una recomendación a The Green Butchers, ya que, a pesar de intentar salirse de la norma, no puedo decir que me haya gustado, y creo que se le podría haber sacado mucho más jugo a su idea central.
jueves, 29 de noviembre de 2018
Noche de Paz (Cicha Noc, 2017)
Reseña: Mientras veía Noche de Paz, no pude evitar compararla con la película rumana Sieranevada (2016), ya que ambas transcurren mayormente durante una reunión familiar en donde gradualmente vamos percibiendo los lazos familiares. Sin embargo, Noche de Paz está lejos del virtuosismo cinematográfico de Sieranevada, y no puede evitar una cierta teatralidad. No obstante, eso no quita que Noche de Paz me haya parecido medianamente interesante.
Noche de Paz se toma su tiempo para ir construyendo las relaciones entre los personajes y ciertos aspectos que eventualmente las pondrán a prueba. El problema es que la cinta termina prometiendo más de lo que eventualmente ofrece, por lo que, cuando las cosas finalmente "explotan", resultan más simplonas de lo que parecían que iban a ser. De todas maneras, hay suficientes atinados comentarios sobre las vínculos familiares para mantener el interés de la audiencia, así como también sólidos toques de humor que le brindan una dimensión apropiadamente tragicómica a la experiencia.
Noche de Paz representa la ópera prima de Piotr Domalewsi, cuya visión como director quizás sea aún algo impersonal y "teatral", pero sabe mantener un ritmo fluido para hacer que la cinta jamás se torne aburrida. Por su parte, las actuaciones son excelentes, ya que se sienten tan naturales que genuinamente parece que estamos viendo a una familia con toda una historia de vida compartida interactuando.
En conclusión, Noche de Paz me pareció una decente película, cuyas fallas no me impiden darle una moderada recomendación. Sin embargo, creo que la previamente mencionada Sieranevada obtuvo un resultado mucho más satisfactorio tocando varios puntos similares a los de esta película, por lo que creo que esa cinta es una opción muy superior.
martes, 27 de noviembre de 2018
Chica de Mostrador (Shopgirl, 2005)
Reseña: Chica de Mostrador ofrece una virtud poco habitual en las películas románticas: examinar las relaciones amorosas desde una óptica realista, mostrando los múltiples aspectos del amor, en lugar de endilgarnos la típica fantasía azucarada que Hollywood acostumbra realizar. Eso ancla la película a un nivel humano con el cual resulta fácil de identificarse, por lo que Chica de Mostrador termina siendo una experiencia interesante y profunda.
Chica de Mostrador está basada en una novela escrita por Steve Martin (quien también adaptó el guion, además de ser uno de los productores y ocupar uno de los roles principales del elenco), y definitivamente se logró mantener la esencia literaria, ofreciendo personajes construidos de manera detallada envueltos en situaciones que van decantando de a poco. Esta es una cinta escrita con sutileza y elegancia en todos los aspectos, generando drama sin forzar nada, además de tener momentos de humor que no van hacia lo burdo ni a la risa fácil, sino que están plasmados con inteligencia y bajo perfil.
Por su parte, las actuaciones son excelentes. Claire Danes hace un brillante trabajo como la epónima chica del mostrador, dotando a su personaje de abundantes matices y expresiones. Martin siempre me pareció un comediante genial, pero Chica de Mostrador nos permite apreciar su también enorme talento como actor dramático, el cual lamentablemente no se ha aprovechado en muchas ocasiones. Finalmente, Jason Schwartzman es uno de esos intérpretes que hacen siempre más o menos lo mismo, pero que saben hacerlo muy bien, por lo que siempre se aprecia su presencia en escena.
Finalmente, el director Anand Tucker también demuestra mesura en su labor, conduciendo la experiencia con un estilo visual sobrio, pero manteniendo un ritmo fluido y natural, además de mostrar una visión propia. Adicionalmente, tengo que hacer mención de la preciosa cinematografía de Peter Suschitzky, la cual logra sacar el máximo provecho de la geografía urbana de Los Ángeles, sabiendo retratar dicha ciudad de manera atractiva y precisa.
En conclusión, Chica de Mostrador puede parecer una película "chica" a simple vista, ya que no hay giros inesperados, ni escenas lacrimosas ni una narrativa donde pasen "grandes" cosas. Sin embargo, quien esté dispuesto a escarbar en la cinta encontrará abundante subtexto y profundidad, lo cual es una clara señal de una película madura e inteligente que tiene la suficiente confianza en el espectador como para permitirle ir más allá de lo que ocurre superficialmente. Personalmente, creo que esa es razón más que suficiente para recomendarla con entusiasmo.
Cam (2018)
Reseña: Cam se enfoca en una chica que se dedica a hacer chats eróticos, hasta que descubre que una persona idéntica a ella robó su identidad en el sitio web y tomó su lugar en los chats. Realmente me pareció una premisa fascinante, que ofrece potencial para invitar a reflexiones profundas sobre la pérdida de la identidad. Sin embargo, a pesar de partir de un concepto tan atrapante, Cam no me dejó muy satisfecho porque no logra sacarle el jugo y hacer algo realmente sustancioso con él. En otras palabras, la cinta no logra ir más allá de una mera idea, sin saber cómo desarrollar una auténtica narrativa en base a ella.
Básicamente, quedé con la impresión de que la guionista Isa Mazzei no supo qué hacer con la inteligente idea que fundamenta su guion, por lo que la cinta nunca termina haciendo algo concreto con ella, hasta culminar en un final que hace que, en retrospectiva, todo lo que vimos anteriormente parezca inconsecuente y hasta irrelevante. Adicionalmente, aparecen varias incógnitas a lo largo de Cam que nunca se resuelven satisfactoriamente. No me molesta cuando una película no se detiene a explicar cada detalle, pero en el caso de Cam, me quedó la sensación de que todas esas cosas quedaron en el aire porque no se encontró la manera de resolverlas adecuadamente, ya que tampoco se nos brindan las herramientas necesarias para que saquemos conclusiones.
Es curioso que haya visto Cam tan poco tiempo después de haber visto la excelente película Buscando... (Searching, 2018), ya que ambas transcurren casi íntegramente en monitores de computadora (en el caso de Buscando..., la cinta entera transcurre en PCs, celulares y fragmentos de noticieros). Mientras aquella logró mantener un ritmo dinámico y adrenalínico de principio a fin, Cam cae ocasionalmente en cierta monotonía que vuelve un poco cansada la experiencia.
En conclusión, Cam partió de un concepto tan provocativo que se podría haber hecho una película excepcional en base a él. Sin embargo, el guion se quedó bastante corto del potencial que ofrecía esa idea, y se nota la dificultad del director Daniel Goldhaber (quien realizó su ópera prima con esta cinta) para generar dinamismo visual. Eso me impide sentir particular entusiasmo por Cam, ya que es otro caso de una cinta con amplio potencial que termina siendo fallida y poco satisfactoria.
Control (2007)
Reseña: Control es la biografía del malogrado Ian Curtis, el cantante de la banda Joy Division, quien tuvo una vida corta y poco feliz, exacerbada por ocasionales ataques epilépticos. A diferencia de otras "biopics", las cuales se limitan a una mera enumeración de hechos verídicos, Control realmente logra pintar una imagen profunda y multi-dimensional de Curtis, retratándolo como una figura trágica y compleja, lo cual genera automática empatía con el espectador. El resultado es una película bastante interesante, la cual merece una recomendación incluso para personas que nunca han estado particularmente interesadas en Joy Division (como yo).
Para empezar, la cinematografía en blanco y negro me pareció una decisión muy acertada. En lugar de ser un arbitrario "gimmick", contribuye poderosamente a complementar los vaivenes emocionales de Curtis. A diferencia de otros directores con una larga trayectoria en video-clips, Anton Corbijn conduce Control con elegancia y sutileza, evitando florituras visuales innecesarias, aunque ello no significa que la experiencia carezca de personalidad y una "voz" distintiva.
Adicionalmente, tenemos las brillantes actuaciones. Sam Riley brinda un estupendo trabajo como Curtis, logrando componer un personaje complicado con absoluta convicción, además de dotarlo de una palpable humanidad que facilita la conexión con la audiencia. Samantha Morton también destaca en el papel de la esposa de Curtis, logrando transmitir sin palabras el genuino amor que siente por él a pesar de sus infidelidades.
En conclusión, Control me pareció una película muy recomendable, realizada con abundante talento tanto al frente como detrás de cámaras. Adicionalmente, merece crédito por ser una de las escasas biografías que genuinamente logran pintar una auténtica imagen del sujeto examinado, mostrando su psicología y sus motivaciones, lo cual le brinda mayor dimensión y profundidad que otras películas pertenecientes a este género.
Aterrados (2017)
Reseña: Si la memoria no me falla, Aterrados es la primera película de terror argentina que he visto en mi vida... y definitivamente fue un buen comienzo. Eso no significa que sea perfecta, pero me pareció una interesante opción de terror sobrenatural con momentos tenebrosos sólidamente logrados, buenas actuaciones y abundante atmósfera. En resumen, una buena muestra de un género poco habitual en el cine argentino, que podría funcionar como incentivo para que más cineastas de este país incursionen en él.
El primer acto de Aterrados es cuando la película mejor funciona. Sin explicaciones ni preámbulos, arroja al espectador de manera inmediata, ofreciéndole un rompecabezas que se va armando gradualmente. De hecho, todavía no queda claro ni quiénes serán los protagonistas de este relato. Adicionalmente, el director Demián Rugna demuestra buena mano para generar horror con elegancia y eficiencia, sabiendo construir tensión para luego encontrar el momento exacto del remate.
En la parte media, Aterrados se empantana un poco. Aquí, la cinta se torna un poco explicativa, apoyándose más en diálogos que dicen lo que está pasando, en lugar de permitir que las imágenes hablen por sí solas. Aunque la película nunca se torne aburrida, me terminó cansando un poco en esta parte, sobre todo después de un arranque tan dinámico. Afortunadamente, cuando llega el tercer acto, Aterrados recobra energía e ímpetu, hasta culminar en un final ambiguo pero satisfactorio.
En ciertos aspectos, Aterrados me recordó un poco a la popular saga de The Conjuring (aunque esté realizada en una escala mucho más modesta), particularmente en lo que respecta a investigadores paranormales investigando una serie de sucesos sobrenaturales en un prosaico barrio. De hecho, en lo que a mí respecta, Aterrados me gustó mucho más que la sobrevalorada primera película de esa franquicia. Pero bueno, más allá de comparaciones y a pesar de algunas fallas, Aterrados funciona bien por sí sola, y el balance general definitivamente cae del lado positivo, por lo que la recomiendo con confianza para seguidores del terror.
viernes, 23 de noviembre de 2018
The State I Am In (Die Innere Sicherheit, 2000)
The State I Am In muestra a dos ex-terroristas con una hija adolescente que deben estar constantemente viviendo a escondidas, siendo la joven quien más sufre las consecuencias de ese estilo de vida. A partir de esa premisa, The State I Am In logra examinar muchos temas provocativos, particularmente en lo que respecta a la sensación de no pertenecer a nada concreto y tener que refugiarse en uno mismo como último recurso (no en balde el título original en alemán de la cinta se traduce como "La Seguridad Interior").
En sus películas posteriores, Petzold fue puliendo su visión, pero The State I Am In ya ofrecía un primero atisbo a la madurez e inteligencia de este cineasta, y solo queda recomendarla como una sólida película con excelentes actuaciones y un guion que ofrece abundante material para pensar. Una buena muestra de cine austero en su forma (la sobriedad terminó convirtiéndose en una marca registrada de Petzold) y plagado de connotaciones y matices en su fondo.
The Whiskey Bandit (A Viszkis, 2017)
Reseña: The Whiskey Bandit es la biografía de Attila Ambrus, un ladrón rumano que cometió una serie de atracos en Hungría, y se convirtió en una especie de leyenda en ese país. A fin de cuentas, es una película sobre robos como ya se han visto muchas veces, pero aún así, The Whiskey Bandit resulta entretenida gracias al vertiginoso ritmo que logra mantener el director Nimród Antal de principio a fin, haciendo que las dos horas de duración se pasen volando.
El espectador logra crear empatía con el personaje de Ambrus a pesar de ser un ladrón. Independientemente de juicios morales, el guion logra crear un personaje humano que se ve envuelto en una difícil situación, y eso lo obliga a robar. Eso no significa que lo que hace esté justificado, pero podemos sentir fácilmente las experiencias que vive el personaje principal. Además, también ayuda la competente y carismática actuación de Bence Szalay en ese rol.
Por su parte, las escenas de acción están muy bien filmadas. Quizás no tengan la espectacularidad que encontraríamos en una película hollywoodense de tema similar, pero están filmadas de manera clara, dinámica y realista. Por el lado negativo, The Whiskey Bandit resulta algo superficial en múltiples aspectos narrativos; algunos elementos son abordados de manera demasiado rápida o son incluso pasados por alto, pero, a fin de cuentas, no es una falla grave ni algo que me haya impedido disfrutar la cinta.
En conclusión, sin ser algo excepcional ni ofrecer nada particularmente novedoso, The Whisey Bandit logró entretenerme de principio a fin, y la recomiendo como una sólida película de acción y suspenso... aunque, en retrospectiva, me haya dejado con un poco de culpa por estar constantemente deseando el triunfo del personaje central. Pero bueno... el cine se basa en entretenimiento, y no en lecciones de moral, y en ese aspecto, The Whiskey Bandit cumple con su objetivo.
Invitación de Boda (Wajib, 2017)
Reseña: Invitación de Boda es una película "pequeña", retratando a un padre y su hijo que recorren en auto las calles de Nazaret para repartir las invitaciones a la boda de la hija (lo cual representa toda una tradición en la religión musulmana). Se podría decir que eso es básicamente todo: no hay giros inesperados ni elementos de relleno. Sin embargo, la cinta resulta interesante y entrañable justamente por retratar algo cotidiano y enfocarse en personajes con quienes resulta fácil identificarse.
Quizás sea porque también son padre e hijo en la vida real, pero Mohammed Bakri y Saleh Bakri (respectivamente) tienen una perfecta química, y resulta agradable presenciar la constante interacción entre ellos. Además, sus actuaciones individuales son excelentes, repletas de sutiles expresiones y matices que contribuyen a enriquecer sus personajes. El elenco secundario también hace un buen trabajo, y todos los personajes logran aportar algo sustancioso a la experiencia general.
El guion está bien escrito, manteniendo eficazmente el foco narrativo sin introducir tangentes innecesarias y definiendo a sus personajes en trazos económicos. Adicionalmente, logra mantener un sano balance entre humor y contenido emocional, logrando que la experiencia no sea ni demasiado solemne ni demasiado liviana, además de añadir toques culturales que logran introducir (al menos a los espectadores occidentales) a las particulares costumbres y formas de vivir de los palestinos.
La dirección de Annemarie Jacir es correcta, aunque quizás le haya faltado algo de personalidad. Personalmente, creo que ese fue el elemento que le faltó a Invitación de Boda para adquirir un nivel adicional al de meramente una película agradable y entretenida. Pero, de todas maneras, hay mucho para apreciar en esta cinta, así que la recomiendo con confianza como una competente muestra de cine palestino.
Algunas Horas de Primavera (Quelques Heures de Printemps, 2012)
Reseña: Algunas Horas de Primavera es la tercera película que he visto del director Stéphane Brizé, y ciertamente empiezo a notar su versatilidad como cineasta, ya que no tiene nada que ver con las otras dos que he visto (Una Mujer, Una Vida -Une Vie, 2016- y El Precio de un Hombre -La Loi du Marché, 2015-). Lo mejor de todo es que Brizé sabe adaptar su visión y su estilo a las necesidades de cada proyecto que enfrenta, haciendo que, cada una a su manera, sean películas sólidas e interesantes. Sin embargo, creo que Algunas Horas de Primavera es la mejor película que he visto de este director hasta el momento.
Algunas Horas de Primavera retrata a un camionero recién salido de la cárcel que se instala en la casa de su madre, y al poco tiempo, descubre que esta tiene una enfermedad terminal. Ciertamente suena como la trama de un dramón empalagoso, pero Brizé es un cineasta talentoso que retrata esa temática con pudor, auténticas emociones y buen gusto. Algunas Horas de Primavera es una película donde los detalles son quienes más logran transmitir cosas sobre los personajes y la narrativa, dejando que las miradas y los silencios hablen por sí solos. Esto significa que la cinta tiene un ritmo reposado y carente de exageraciones emocionales, lo cual no la hace aburrida en lo más mínimo, sino doblemente efectiva y emotiva.
A diferencia del enfoque que hubiera adoptado un drama más convencional, en donde hubiéramos visto a una madre y a un hijo que se adoran, los protagonistas de Algunas Horas de Primavera tienen una relación conflictiva que se acerca a la violencia en alguna ocasión. Esto contribuye a brindar dimensión y profundidad a los personajes, resaltando su humanidad y utilizando ello como un inteligente contraste de que, a pesar de lo que demuestran en la superficie, sienten genuino amor mutuo en el fondo.
También ayudan mucho las excelentes actuaciones del elenco entero. Hélène Vincent y Vincent Lindon hacen estupendos trabajos en los difíciles roles principales, teniendo una química tan palpable y creíble que el espectador logra aceptarlos inmediatamente como madre e hijo. En roles secundarios, pero no por ello carentes de importancia, tenemos brillantes desempeños de Olivier Perrier y Emmanuelle Seigner. En esta cinta, todos los personajes logran aportar algo rico y sustancio al tapiz narrativo.
En conclusión, Algunas Horas de Primavera no es una experiencia "divertida" (ni de ninguna manera pretende serlo), pero me pareció una brillante película que logra abordar temas difíciles con abundantes dosis de honestidad emocional y un preciso ojo para los detalles, hasta culminar en un extraordinario final que resulta sumamente emotivo por la delicadeza y sensibilidad con la cual está retratado. Personalmente la recomiendo con total confianza, aunque advirtiendo que puede afectar de manera muy íntima y directa a personas que hayan vivido de cerca situaciones como las que retrata esta cinta.
Operation Red Sea (Hong Hai Xing Dong, 2018)
Reseña: Operation Red Sea es una película bélica china cuya manufactura no tiene nada que envidiarle a las grandes producciones hollywoodenses. Las escenas de acción están muy bien filmadas, y retratan el combate de manera sumamente cruda e impactante. Adicionalmente, es admirable la escala épica que el director Dante Lam logró brindarle a cada escena de Operation Red Sea. El lado negativo de esta película es que no parece tener mucho más para ofrecer que eso.
La narrativa de Operation Red Sea es excesivamente básica, y tranquilamente podría pertenecer a un videojuego. En otras palabras, la estructura del guion se siente como la de diversos niveles que los personajes van atravesando hasta finalmente llegar a la última batalla. Además, los personajes se sienten como figuras de cartón, carentes de dimensión y definidos por sus rasgos más elementales; en otras palabras, los personajes son prácticamente intercambiables, lo cual se exacerba en el caos del combate (cuando es difícil distinguirlos en más de una ocasión), por lo que cuesta crear empatía con alguno.
Como sea, las secuencias de acción están tan bien hechas que bastaron para evitar que Operation Red Sea se vuelva aburrida. No obstante, no puedo negar que me empezó a cansar un poco durante el último tramo, ya que al tener muy poco más que acción, ya me sentía algo abrumado por el constante combate sin el suficiente respaldo narrativo ni emocional. En resumen, medianamente entretenida, pero a fin de cuentas hueca y poco memorable. En ese sentido, Operation Red Sea lamentablemente se parece demasiado a muchas grandes producciones hollywoodenses.
jueves, 22 de noviembre de 2018
Mi Verano de Amor (My Summer of Love, 2004)
Reseña: Mi Verano de Amor retrata el apasionado romance que se desarrolla entre dos jóvenes atractivas (aunque de distinta clase social, ya que una es rica y la otra es pobre) durante un verano en un pequeño pueblo inglés. Eso quizás suene como la síntesis de una película de sexo "soft-core", pero la realidad es bastante diferente, ya que el guion (basado en una novela) está interesado en explorar terreno más interesante, además de que el director Pawel Pawlikowski brinda a la cinta una inmersiva atmósfera y una pátina de refinamiento y elegancia que la hacen tener un sabor muy particular.
Ciertamente hay abundantes connotaciones eróticas en Mi Verano de Amor, pero la cinta nunca recurre a lo burdo ni a lo explícito. Por el contrario, Pawlikowski sabiamente prefiere sugerir antes que mostrar, lo cual termina siendo mucho más efectivo y satisfactorio. Además, la atmósfera veraniega está muy bien lograda, transmitiendo inmediatamente esa sensación de calor agobiante, además de plasmar el desarrollo del romance entre las protagonistas de manera etérea y hasta poética.
En cuanto a las actuaciones, Natalie Press y Emily Blunt hacen un sólido trabajo, aunque, de manera paradójica (ya que nunca logró alcanzar la eventual fama de su co-estrella), la primera opaca a la segunda en más de una ocasión. Realmente Press logró dejarme una muy buena impresión con todos los matices que logró brindarle a su rol, y es una lástima que su carrera no haya llegado a mucho. Finalmente, Paddy Considine también merece mención con su sólido desempeño como el hermano del personaje de Press, un ex-convicto que logró replantear su vida con el ferviente catolicismo que terminó desarrollando.
Entonces, Mi Verano de Amor es una película que logra encontrar un armonioso balance en múltiples aspectos: es erótica sin ser pornográfica; es profunda sin ser solemne; y es liviana sin ser hueca. Quizás le haya faltado un indescriptible "algo" para llegar a ser una excelente película, pero, de todas maneras, disfruté la experiencia, la cual, con una duración que no alcanza ni los noventa minutos, logra ser concisa y no deja el más mínimo lugar para el aburrimiento.
The Ballad of Buster Scruggs (2018)
Reseña: Como es habitual en las películas antológicas, The Ballad of Buster Scruggs ofrece segmentos que funcionan mejor que otros. Por eso, lo más importante en este tipo de películas es el balance general de la experiencia, el cual definitivamente cae del lado positivo en esta ocasión. Además, a diferencia del arbitrario orden de los segmentos de otras antologías, The Ballad of Buster Scruggs estructura a sus relatos manteniendo una progresión, por lo que la experiencia completa se siente unificada y cohesiva, en lugar de sentirse como una mera acumulación de historias.
El primer relato se titula igual que la película, y resulta el más humorístico, ofreciendo abundantes dosis de humor negro y algunos toques de sangrienta violencia. Este segmento sigue una lógica absurdista y resulta divertido, pero a fin de cuentas, no se siente muy profundo, y no puede evitar sentirse como un chiste extendido. De todas maneras, Tim Blake Nelson lidera esta historia brindando convicción y desbordante carisma.
El segundo relato se titula "Near Algodones", y cuenta con una narrativa más concreta que la del primer episodio, además de ofrecer ingenio y abundante humor. En esta historia, nunca termina sucediendo lo que uno cree que va a pasar, y su breve duración (aunque es un poco más largo que el primer segmento) lo hace conciso y muy efectivo, logrando contar una historia sólida y sin relleno en poco tiempo.
Las cosas se empiezan a tornar más sombrías en el tercer segmento, titulado "Meal Ticket". Gracias a las excelentes actuaciones de Liam Neeson y Harry Melling, no hacen falta palabras para entender perfectamente la relación entre los dos personajes centrales (un empresario circense y el lisiado artista del espectáculo). Prescindiendo del humor de los relatos anteriores, "Meal Ticket" adquiere connotaciones oscuras que le brindan múltiples niveles de significado, hasta culminar en un final devastador e inesperado.
Luego, tenemos mi segmento favorito de The Ballad of Buster Scruggs: "All Gold Canyon". Con pocos diálogos y un mínimo número de personajes, este relato se apoya puramente en el lenguaje visual para brindar una historia fascinante que logra hacer elocuentes comentarios sobre la avaricia y los extremos hasta los cuales puede llegar el humano para obtener riqueza. Además, la actuación de Tom Waits es brillante, además de lograr que su personaje cree empatía automática con el espectador.
Luego, tenemos "The Gal Who Got Rattled", el cual se aproxima bastante a ser un drama clásico, mostrando los avatares que vive una mujer que iba a viajar a otra ciudad para casarse, hasta que un evento trágico interrumpe esos planes. Este segmento quizás haya sido el que menos me gustó, ya que, aunque de ninguna manera sea malo, se extiende más de lo necesario, contrastando con la concisión y economía de todos los demás relatos. De todas maneras, no aburre, y la actuación de Zoe Kazan en el papel central es muy buena.
Finalmente, "The Mortal Remains" se encarga de cerrar la experiencia con un tono elegíaco que bordea lo macabro en más de una ocasión. Este segmento está conformado por un extenso diálogo que resulta interesante por los temas abordados, además de estar filmado con un dinamismo visual que elimina todo rastro de monotonía.
En conclusión, poniendo la experiencia completa en la balanza, The Ballad of Buster Scruggs es una experiencia muy interesante, respaldada por sólidas actuaciones, extraordinarios valores técnicos y el inconfundible sello de los Hermanos Coen detrás de cámaras. Además, es una sólida muestra de las eclécticas variedades que ofrece el género western, abordando tonos tan diversos que van desde la comedia alocada hasta terrenos muchos más oscuros. En resumen, una película redonda, en donde sus diversas partes se concatenan para formar un todo rico y satisfactorio.
Blindspotting (2018)
Reseña: Francamente, la primera mitad de Blindspotting no me estaba entusiasmando mucho. En ese momento, la película me estaba pareciendo una comedia bastante irritante y poco graciosa, yendo de aquí para allá sin definir exactamente qué contar. Afortunadamente, la experiencia mejora durante la segunda mitad, cuando Blindspotting adquiere connotaciones más serias y hasta profundas, aunque la cinta sigue manifestando problemas para encontrar el foco narrativo.
De todas maneras, no puede negarse que Blindspotting es una película ambiciosa, pretendiendo combinar drama, comedia y comentario social en un mismo paquete. El problema es que nunca termina de meterse de lleno en ninguno de esos tres aspectos, por lo que el resultado es una combinación de elementos divergentes que nunca logran cohesionar de manera natural. De todas maneras, como ya he dicho en otras ocasiones, siempre será preferible una película que tuvo ambición y se quedó corta, antes que otras que prefiere no tomar riesgos y quedarse en la fácil y segura mediocridad.
El elenco de Blindspotting está mayormente conformado por actores desconocidos (al menos por mí), pero todos hacen un buen trabajo. Daveed Diggs demuestra credibilidad en el rol de Collin y el carisma suficiente para que el espectador cree simpatía con su personaje. Por su parte, Rafael Casal interpreta un personaje bastante desagradable (un amigo de Collin con una elevada propensión a la violencia), pero el intérprete supo mantener la humanidad de su rol. Finalmente, Janina Gavankar demuestra apropiada calidez en papel, el cual es una ex-novia de Collin que intenta que él mantenga un buen camino en su vida y evite rodearse de malas influencias.
En conclusión, Blindspotting es una película irregular, que intentó demasiadas cosas al mismo tiempo sin llegar a ser del todo satisfactoria. Aún así, merece crédito por su audacia, además de que no puede negarse la relevancia de la película en los tiempos actuales, demostrando que, lamentablemente, el racismo sigue vigente (no solo en Estados Unidos, sino en cualquier parte del mundo), aunque se manifieste de maneras menos explícita que en otras épocas.
jueves, 15 de noviembre de 2018
Buscando... (Searching, 2018)
Reseña: "Un padre emprende una desesperada búsqueda de su hija desaparecida". Pocos argumentos suenan tan genéricos como ese, ya que se ha empleado en infinidad de thrillers mediocres y olvidables. Sin embargo, Buscando... parte de esa misma premisa para ofrecer una experiencia única y alucinante, que logra mantener constantemente en vilo al espectador con sus giros inesperados y su prodigioso dominio del lenguaje cinematográfico.
Cabe aclarar que Buscando... está realizada de manera muy particular, ya que toda la película transcurre en pantallas de computadora y celular, así como también fragmentos de noticieros. Eso quizás suene estático, pero la realidad es diametralmente opuesto. El director Aneesh Chaganty (haciendo un asombroso debut) logra que cada segundo de Buscando... sea vertiginoso y emocionante, haciendo que compartamos intensamente la desesperación que vive el protagonista. Y lo más loable de todo es que dicha proeza técnica no es un "gimmick" arbitrario, sino parte integral de la narrativa de la cinta.
Como sucede en las excelentes películas, Buscando... funciona en múltiples niveles. Además de ser un apasionante thriller, también es un conmovedor drama sobre la relación entre un padre y su hija. De manera inmediata, podemos sentir el profundo amor paternal que siente él por ella, por lo que luego resulta fácil compenetrarse con la cruzada que emprende el padre para encontrarla. Adicionalmente, Buscando... logra ser una película muy relevante para los tiempos actuales, retratando los peligros inherentes en las redes sociales, y cómo es posible tener toda una vida aparte en esos dispositivos electrónicos. Finalmente, la actuación de John Cho en el papel protagónico es brillante, logrando expresar sutilmente las emociones de su personaje, además de poseer un abundante carisma que le brinda una magnética presencia en escena.
En conclusión, Buscando... es una fascinante experiencia cinematográfica que logró mantenerme enormemente entretenido de principio a fin (los cien minutos de duración genuinamente se me pasaron volando), además de haber logrado crispar mis nervios y hasta generarme un nudo en la garganta en más de una ocasión. Definitivamente la contaré entre mis cintas favoritas de este año, ya que no es común encontrar una película que me involucre de manera tan intensa como espectador, al mismo tiempo que ofrece algo innovador.
miércoles, 14 de noviembre de 2018
Nancy (2018)
Reseña: De manera inmediata, Nancy logra establecer un fascinante personaje central. Gracias a la estupenda actuación de Andrea Riseborough y la complejidad y matices que le brinda el guion, la epónima Nancy logra ser una figura triste y solitaria que genera compasión. La cinta retrata lo que sucede cuando Nancy cree ser la hija desaparecida hace treinta años de un matrimonio, por lo que ella se acerca a esas personas y empieza a generarse un vínculo. El punto de la película no es generar misterio sobre si Nancy es o no es la hija, sino mostrar cómo esa relación se va cultivando. El resultado es interesante escena por escena, pero, en retrospectiva, siento que la cinta no termina llegando a ningún lado.
Nancy ofrece un relato calmo y carente de aspavientos dramáticos, dejando que todo se desarrolle a un ritmo natural y sin apresurar nada. Eso me pareció loable, pero, como dije en el párrafo previo, Nancy no ofrece un cierre genuinamente satisfactorio, concluyendo la experiencia de una manera truncada que termina dejando al espectador con ganas de más. A diferencia de lo que me ocurre con muchas películas, siento que Nancy debería haber sido más larga (la cinta dura apenas ochenta y cinco minutos, con créditos incluidos), ya que los personajes y las relaciones entre ellos son tan ricos y tienen tanto potencial dramático que merecían mayor tiempo y desarrollo. En otras palabras, siento que Nancy podría haber explorado más cosas de lo que terminó haciendo.
De todas maneras, las actuaciones son admirables. El trabajo de Riseborough es extraordinario, componiendo a su personaje con sutileza y una inmensa gama expresiva. Adicionalmente, como también hizo en la reciente Mandy (2018), Riseborough logra dotar a la protagonista de una etérea fragilidad que hace su presencia hipnótica en escena. J. Smith-Cameron y Steve Buscemi también ofrecen fantásticos desempeños como los padres que perdieron a su hija hace treinta años, transmitiendo intensas emociones sin exagerar absolutamente nada. Finalmente, John Leguizamo logra sacar todo el jugo posible a su papel, el cual es breve, aunque deja su impronta gracias a su excelente actuación.
En conclusión, Nancy es una buena película, además de ser una sólida ópera prima para la directora Christina Choe, quien se revela como una cineasta poseedora de visión y talento. El problema con Nancy es que lo que ofrece es tan interesante que me resultó un poco decepcionante que la cinta dejara las cosas a medias, cuando se podría haber utilizado más tiempo en añadir matices y detalles que hubieran enriquecido la experiencia. Aún así, no puedo negar que Nancy logró sostener mi interés de principio a fin, y por eso la recomiendo con confianza.
Place Vendôme (1998)
Reseña: Place Vendôme empieza de manera interesante, ambientando su relato en un contexto poco habitual en cine (los tejes y manejes que se desarrollan entre joyeros), además de prometer el desarrollo de un intrincado misterio. Sin embargo, a medida que la cinta va avanzando, se empieza a tornar un poco aburrida, y aunque no puedo decir que me haya parecido mala, tampoco me terminó generando mucho entusiasmo.
Uno de los principales problemas que encontré en Place Vendôme fue su indecisión narrativa. En otras palabras, la cinta nunca logra definir si pretende ser un thriller o un drama sobre una mujer alcohólica que repentinamente tiene que hacerse cargo del negocio de las joyas tras el suicidio de su esposo. En consecuencia, la película no termina siendo ni una cosa ni la otra, yendo de aquí para allá sin encontrar un eje en donde anclarse. Adicionalmente, el aspecto de thriller me pareció demasiado confuso, y me costó bastante seguir el hilo de lo que estaba sucediendo.
Otro de los problemas de Place Vendôme es su excesiva solemnidad. Obviamente no pretendía encontrarme con una comedia, pero su constante seriedad y la ausencia del más mínimo esbozo de humor se traducen en tedio en más de una ocasión, y eso, combinado con los divagues y la confusión del guion, contribuyó a que gradualmente fuera perdiendo interés en lo que ocurría en la pantalla. En pocas palabras, Place Vendôme me pareció una película gélida y emocionalmente distante, con la cual me costó establecer una conexión.
De todas maneras, las actuaciones y la manufactura de la película son competentes, además de que fue una buena idea explorar un particular mundo que no se ve retratado con mucha frecuencia. Sin embargo, esas virtudes hacen que los errores de la cinta se vuelvan doblemente frustrantes, demostrando que Place Vendôme podría haber llegado más lejos. Como sea, no siento que pueda darle una recomendación.
domingo, 11 de noviembre de 2018
City of Ghosts (2002)
Reseña: City of Ghosts es un thriller sobre un estafador que viaja a Camboya para reclamar lo que le pertenece y huir de las autoridades federales que están tras su pista. Esta es la primera y, hasta el momento, única película que dirgió Matt Dillon, quien demuestra genuina fascinación por Camboya, retratando sus paisajes y sus contrastes sociales con buen ojo para los detalles. Sin embargo, el problema es que, en más de una ocasión, City of Ghosts termina pareciendo más un video turístico de ese país que otra cosa, ya que el guión (co-escrito por Dillon mismo y Barry Gifford) se dispersa demasiado y tiene dificultades en encontrar el foco narrativo.
La trama de City of Ghosts se distrae con demasiadas tangentes inútiles que no conducen a ningún lado, al mismo tiempo que impide la total compenetración con la trama central. Dicha trama central es interesante y contiene un sólido componente emocional, pero no se ahonda en ella tanto como se debería, por lo que, en retrospectiva, algunas cosas parecen inconsecuentes y/o resueltas a las apuradas.
Por el lado positivo, el elenco hace un excelente trabajo, lo cual no es de extrañar cuando hay actores tan buenos como Dillon, James Caan y Stellan Skarsgård. Por el otro lado, Natasha McElhone y Gérard Depardieu se sienten desperdiciados, ya que interpretan roles que no aportan nada sustancioso a la trama y cuya presencia tranquilamente se podría haber omitido, ya que, de esa manera, la experiencia hubiera resultado más concisa y enfocada.
A pesar de mis quejas, City of Ghosts no me aburrió, además de que, en su faceta como director, Dillon demuestra habilidad para crear atmósfera y brindar un estilo personal a la experiencia. Sus problemas de guion y edición impiden que la experiencia sea totalmente satisfactoria, pero aún así, City of Ghosts ofrece suficientes aspectos interesantes como para hacerla merecedora de una mediana recomendación.
Terrifier (2016)
Reseña: Terrifier es una entretenida e implacable película de terror que sabe encontrar un buen balance entre tensión, genuina crueldad y hasta toques de un negrísimo sentido del humor. Además, con una duración que ni alcanza los noventa minutos (incluyendo créditos), Terrifier es una cinta concisa y eficiente, que evita todo tipo de relleno o desviaciones innecesarias para ir al grano y divertir de principio a fin. A pesar de tener todo eso a favor, no puede negarse que la película tiene algunas fallas que demeritan un poco la experiencia general.
Para empezar, se nota que Terrifier fue realizada con un presupuesto muy reducido. No me molestan las películas hechas con poco dinero; de hecho, hay muchas de ellas que son muy superiores a varias realizadas con mucho. El problema de Terrifier es que se ve tan barata que bordea peligrosamente lo amateur. Por su parte, algunos efectos de sangre están bien hechos, pero otros se ven falsos y artificiales, y lo mismo aplica a las instancias de maquillaje. En pocas palabras, creo que Terrifier hubiera podido realzar sus virtudes si hubiera sido realizada con más dinero, o al menos con un aspecto más "profesional".
Otra falla significativa de Terrifier son las pésimas actuaciones. Todos los intérpretes de esta cinta son tan rígidos y carentes de expresividad que parecen estar simplemente repitiendo sus líneas de memoria, en lugar de estar genuinamente representando personajes. Los roles centrales están interpretados por Jenna Kannell, Catherine Corcoran y Samantha Scaffidi; las tres son físicamente atractivas, pero sus actuaciones son tan malas que cuesta trabajo crear empatía con sus personajes y preocuparse por su supervivencia.
De todas maneras, quedé satisfecho con Terrifier a pesar de esos defectos. No será una gran película ni mucho menos, pero definitivamente logró divertirme de principio a fin, ofreciendo una experiencia física y visceral, lo cual debería encontrarse más seguido en el género de terror. Será interesante ver hacia dónde se dirige la carrera futura del director Damien Leone; si dispusiera de mayor cantidad de dinero y puliera un poco el aspecto visual, creo que tiene potencial dentro de este género.
The Cuckoo (Kukushka, 2002)
Reseña: The Cuckoo tiene una primera media hora muy prometedora. Con un mínimo de diálogos, logra presentar un relato ambientado en la Segunda Guerra Mundial que resulta inusual y bastante gracioso en su absurdismo. Además, al dejar que las imágenes hablen por sí solas y cuenten ellas mismas lo que ocurre, genuinamente se logra transportar al espectador al bizarro universo de la cinta, al mismo tiempo que logra hipnotizarlo por ofrecer algo bastante peculiar y original.
Desafortunadamente, luego de ese fascinante comienzo, The Cuckoo se empantana. No se torna aburrida debido a las sólidas actuaciones y el ritmo que logra mantener el director Aleksandr Rogozhkin, pero la narrativa no avanza, ya que termina divagando de aquí para allá sin un propósito específico. Nuevamente, terminé teniendo la sensación de presenciar un "cortometraje estirado"; lo que hubiera resultado eficiente y compacto en una reducida duración no logra sostenerse a lo largo de poco más de cien minutos de metraje. Adicionalmente, The Cuckoo culmina en una nota "espiritual" (por llamarla de algún modo) que se siente absolutamente forzada y que parece sacada de una película completamente distinta.
Los actores son los principales encargados de mantener a flote la experiencia de The Cuckoo. Ville Haapasalo tiene el personaje más humorístico, y su trabajo resulta simpático, sin por ello olvidar de dotar al personaje de una genuina sincera humanidad. Por su parte, Victor Bychkov tiene un rol más serio, pero evita que su rol se torne monocorde gracias a su amplia gama expresiva. Finalmente, Anni-Kristiina Juuso encarna un personaje que podría haber resultado irritante en manos de una actriz menos talentosa, pero ella logra que su rol resulte simpático y querible en lugar de empalagoso.
Entonces, The Cuckoo es una película que empieza muy bien, pero que luego va desinflándose para finalmente terminar dejando un sabor que no resulta del todo satisfactorio. No me arrepiento de haberla visto, y tiene algunos méritos que la hacen merecedora de una tibia recomendación. Sin embargo, no puedo ignorar que la cinta parecía encaminada a ofrecer algo mucho más atrapante y memorable que lo que eventualmente terminó siendo.
jueves, 8 de noviembre de 2018
Thank You for Your Service (2017)
Reseña: Thank You for Your Service retrata la desoladora y angustiante situación de los soldados que volvieron a su hogar después de haber combatido en Irak. Lo que se demuestra es que el final de la batalla es lamentablemente tan solo el principio de secuelas emocionales que pueden durar todo el resto de la vida, acarreando severas dificultades para enfrentar la vida cotidiana. El resultado es un drama íntimo y sobrio que sabe capturar la atención del espectador y dejarlo reflexionando en algunos aspectos.
Es cierto que el tema de los soldados que regresan a su hogar se ha visto en varias ocasiones. Sin ir más lejos, Thank You for Your Service fue escrita y dirigida por Jason Hall, quien fue responsable del guion de la sobrevalorada Francotirador (American Sniper, 2014), la cual abordó temáticas muy similares. Sin embargo, eso no evitó que Thank You for Your Service me pareciera un competente drama por mérito propio; de hecho, yo la pondría bastante por encima de la mencionada Francotirador, ya que creo que ofrece un examen más realista y detallado de la situación que atraviesan los soldados. Eso me lleva al principal mérito de la película: no hay drama forzado ni situaciones edulcoradas; simplemente se limita a retratar la triste y prosaica realidad dejando que los hechos hablen por sí solos.
En lo que respecta el elenco, siento que Miles Teller se quedó un poco corto en su actuación; habitualmente lo considero un buen actor, pero en Thank You for Your Service, no sentí que lograra transmitir mucho, por lo que algunos momentos que deberían haber sido devastadores no lograron despertar una gran reacción emocional en mí. Por el otro lado, a pesar de ser intérpretes menos famosos que Teller, creo que Beulah Koale y Joe Cole ofrecen desempeños muy superiores, transmitiendo la angustia y desesperación de sus personajes con sutileza y credibilidad.
Por el lado negativo (además de la actuación de Teller), cerca de la conclusión de Thank You for Your Service, se plantea un conflicto que parece añadido a la fuerza y es resuelto a las apuradas. Adicionalmente, todo el segmento dedicado a la visita de un soldado que fue herido en la cabeza durante la guerra se extiende más de lo necesario, y aunque no llega a tornarse aburrido, obstruye un poco el flujo natural de la experiencia. De todas maneras, a pesar de esos defectos, Thank You for Your Service me pareció una sólida película, y siento que puedo recomendarla con confianza. A fin de cuentas, la cinta no ofrece algo nuevo, pero eso no importa cuando la narrativa está bien planteada y ejecutada.
miércoles, 7 de noviembre de 2018
Cold War (Zimna Wojna, 2018)
Reseña: Cold War cuenta una historia de amor con un agradable clasicismo, genuinamente logrando transportar al espectador a otra época (la cinta transcurre en diversos países de Europa desde fines de los '40 hasta mediados de los '60). Es cierto que el guión no innova, pero no le hace falta hacerlo para evocar intensas emociones y ofrecer una experiencia que sabe sacar provecho de las herramientas del cine para ofrecer algo interesante.
Para empezar, los aspectos técnicos de Cold War son sobresalientes. Desde la exquisita cinematografía en blanco y negro y el formato cuadrado de imagen hasta los más mínimos detalles de ambientación, ningún elemento fue librado al azar, y todos contribuyen poderosamente para complementar la historia y crear una auténtica atmósfera. El director Pawel Pawlikowski demuestra amplias dosis de elegancia y buen gusto, haciendo que Cold War sea una cinta constantemente atractiva.
En lo que respecta a los actores, el dúo protagónica de Tomasz Kot y Joanna Kulig resulta excepcional. No solo tienen un excelente desempeño individual, sino que también comparten una maravillosa química como amantes que constantemente deben verse separados; tan solo en la manera de mirarse de ambos, podemos percibir la fogosidad que ambos personajes comparten en esa profunda pasión.
Por el lado negativo, creo que Cold War tropieza un poco al final. La conclusión se siente algo apresurada y forzada, y creo que se podría haber encontrado un mejor remate para la experiencia, que al menos estuviera más a tono con lo que se vio previamente. De todas maneras, Cold War es indudablemente una buena película con muchos atributos técnicos y artísticos, por lo que la recomiendo con absoluta confianza.
Hearts Beat Loud (2018)
Reseña: La principal sensación que tuve viendo Hearts Beat Loud fue saturación. Francamente, ya estoy harto de estas películas "indie" que, en líneas generales, abarcan los mismos temas y tienen el mismo estilo. Sentía que todo lo que estaba viendo en Hearts Beat Loud ya lo había visto en otras cien películas.
Hearts Beat Loud cuenta la historia de un padre que decide crear una banda de rock con su hija para re-afianzar la relación con ella poco antes de que la joven empiece la universidad en la otra punta del país. Es una trama sencilla, pero con potencial de despertar emociones honestas. Sin embargo, esta cinta se dispersa con demasiadas sub-tramas irrelevantes que hacen que la experiencia pierda enfoque. Todos esos aspectos divergentes nunca se unifican en un todo satisfactorio, sino que parecen elementos de películas distintas mezclados de manera arbitraria.
En cuanto al dueto protagónico, tengo opiniones encontradas. En el rol del padre, Nick Offerman hace un buen trabajo, expresando con sutileza y convicción el afecto que siente por su hija. Sin embargo, en el papel de la joven, Kiersey Clemons se siente insulsa y no logra transmitir mucho en su personaje, impidiendo que su personaje resulte entrañable y que se genere una auténtica química con Offerman.
Quienes no hayan visto TANTAS cintas "indie" de este tipo quizás disfruten Hearts Beat Loud más que yo. Sin embargo, yo ya estoy hastiado de películas como esta, y por eso no siento que pueda recomendarla. Si quieren ver una comedia dramática en donde la música es un aspecto esencial de la experiencia, Sing Street (2016) es una opción infinitamente más recomendable, poseedora de la calidez y emotividad que no logré encontrar en Hearts Beat Loud.
The Twilight Samurai (Tasogare Seibei, 2002)
Reseña: Ante todo, hay que aclarar que The Twilight Samurai NO es una película de acción. Hay solo dos duelos de samurais en la cinta entera (muy bien filmados, por cierto), pero, por lo demás, este es un drama parsimonioso y reflexivo con tintes románticos, además de reflejar varios aspectos culturales y históricos de Japón. El resultado es una película impecablemente producida y muy satisfactoria, con abundantes niveles de riqueza narrativa y emocional.
The Twilight Samurai está basada en una historia corta, y ciertamente supo conservar el sabor de una buena obra literaria, dejando que el relato y los personajes vayan decantando de manera elegante y sin prisa, permitiendo que el espectador se sienta cada vez más sumergido en la experiencia. En la usual tradición del cine oriental, el director Yoji Yamada emplea un ritmo sereno y reposado, el cual nunca se torna aburrido, ya que ese es exactamente el tono que requería una película así.
Por su parte, los aspectos técnicos de The Twilight Samurai son impecables. La reconstrucción de época es perfecta y nunca busca llamar la atención por sí misma; por el contrario, todo se ve natural y creíble sin olvidarse de transportar al espectador a ese particular período histórico. Además, como dije previamente, las partes de acción son escasas, pero aún así logran generar tensión y crear una adecuada ilusión de realismo. En lo que respecta al elenco, todos hacen un buen trabajo, pero particularmente quiero destacar a Hiroyuki Sanada en el papel protagónico, brindando carisma y credibilidad a su rol, lo cual lo hace entrañable de manera inmediata.
En conclusión, definitivamente hay mucho para apreciar en The Twilight Samurai. Quizás algunos espectadores se sientan ahuyentados por el pausado ritmo de la cinta, pero a mí me pareció una experiencia profunda y bastante interesante, con un sólido guion e impresionantes aspectos técnicos (tengo que hacer una mención especial de la cinematografía, la cual retrata la campiña japonesa de manera sumamente atractiva).
viernes, 2 de noviembre de 2018
La Esposa (The Wife, 2017)
Reseña: La Esposa cuenta la historia de un respetado escritor que viaja a Suecia con su esposa y su hijo para recibir el Premio Nobel de Literatura, al mismo tiempo que se va desenmascarando gradualmente desenmascarando un importante secreto detrás de su obra. El resultado es una película interesante, magistralmente actuada y sobriamente dirigida, que quizás no resulte muy memorable a largo plazo, pero que indudablemente sabe mantener la atención del espectador.
La Esposa es una de esas películas "de actores", ya que los personajes centrales son complejos y la cinta entera se enfoca en extensos diálogos. En ese sentido, La Esposa se beneficia mucho con las estupendas actuaciones de Glenn Close y Jonathan Pryce en los papeles protagónicos, haciéndonos creer de manera inmediata que genuinamente estamos viendo a un matrimonio de muchos años con toda una historia de vida compartida. Por el otro lado, Max Irons se ve un poco forzado en el papel del hijo, pero no termina importando tanto, ya que la película entera descansa sobre los hombros de Close y Pryce, y ambos salen muy airosos.
Por su parte, el director Björn Runge conduce la experiencia de manera discreta, evitando toda floritura visual para dejar que el relato se desarrolle a su propio ritmo y sacando el máximo provecho del gran talento de los protagonistas. Su trabajo es bueno, aunque quizás le hubiera podido brindar un poco más de personalidad a la película; quizás eso fue lo que le faltó a la cinta para ser algo más que competente, pero poco memorable.
La Esposa toca algunos temas que están de moda en la actualidad (no diré cuáles para evitar "spoilers"). Independientemente de la percepción que cada espectador tenga sobre ellos, lo que importa es que el guion los utiliza como parte de una narrativa profunda y bien escrita, formando parte de una película sólida que merece una recomendación, principalmente para admirar los extraordinarios desempeños de Close y Pryce.
Spun (2002)
Reseña: Spun es un claro caso de "estilo sobre sustancia". Por un lado, esta cinta sobre un grupo de drogadictos y sus desventuras está repleta de atractivos trucos visuales, juegos de cámara y recursos estilísticos que indudablemente llaman la atención. Por el otro lado, el guion es bastante flojo y carente de foco, por lo que el despliegue de estilo se siente vacío y la experiencia termina cansando un poco.
Spun es una película superficial, en el sentido de que busca constantemente llamar la atención con su estilo o falta de problema para mostrar escenas de mal gusto, pero olvidándose de contar un relato sólido y cohesivo. Además, el personaje central de la película (interpretado por Jason Schwartzman) es tan desagradable y carente de matices que cuesta trabajo crear empatía con él. Si tuviera que sintetizar la experiencia de haber visto Spun, diría "mucho ruido y pocas nueces", ya que la cinta apela a cualquier cosa con tal de distraer de su pobre guion.
En cuanto al elenco, Schwartzman hace lo mejor que puede con su personaje; en otras palabras, las objeciones que tengo son contra la forma en la cual su rol estuvo escrito, y no contra su actuación en sí. La malograda Brittany Murphy tiene un muy buen desempeño, y es una lástima que su vida haya finalizado tan joven, ya que era una de las pocas actrices que simultáneamente eran una cara bonita y tenían talento histriónico. Finalmente, John Leguizamo y Mickey Rourke demuestran convicción y desbordante entusiasmo en sus bizarros papeles.
El director Jonas Åkerlund tiene abundante experiencia como realizador de video-clips, y Spun lo hace demasiado evidente, ya que queda muy clara su habilidad de utilizar un estilo visual distintivo e imaginativo, pero al mismo tiempo, también se evidencia su incapacidad para plasmar una historia en imágenes de manera disciplinada y orgánica. Puedo darle una tibia recomendación a Spun solo para quienes quieran ver un mero despliegue de estilo, pero en demás casos, mejor dejarla pasar, sobre todo teniendo en cuenta que hay películas sobre drogas muy superiores (personalmente, creo que Requiem para un Sueño -Requiem for a Dream, 2000- sigue siendo la cinta definitiva dentro de ese sub-género).
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